Al igual que las antenas de radio amplifican las señales de nuestros teléfonos móviles y televisiones, se puede aplicar el mismo principio a la luz. Por primera vez, investigadores de CNRS ha tenido éxito en la producción de nanoantenas de filamentos de ADN, dos nanopartículas de oro y una pequeña molécula fluorescente que captura y emite luz. A largo plazo, este trabajo puede llevar al desarrollo de diodos emisores de luz más eficientes, células solares más compactas o incluso ser usado en criptografía cuántica.